La situación con la Covid-19 se nos ha hecho un poco cuesta arriba a los zaragozanos y a las zaragozanas. Necesitamos una solución urgente. Por ello, hemos contactado con una de las personas que mejor conoce la capital aragonesa. ¿Quién es? El único e inigualable César Augusto. Estábamos seguros de que nos iba a dar las claves para acabar con esta amenaza; pero, una vez hecha la entrevista, no sabemos si lo que nos ha dicho servirá para algo. No obstante, hemos pasado un ratico entretenidos con este personaje.
César Augusto, el superhéroe de la ciudad
César Augusto es un gran conocedor de la cultura y la idiosincrasia aragonesa, pues él mismo fundó esta urbe e incluso le dio su nombre. Se define como «experto en la flora y la fauna de Zaragoza». Apunta que el origen de la problemática es que no sabemos cómo hablar a los «mañicus y baturrix», ya que tienen un idioma propio y especial. Por todo esto, el emperador ofrece sus servicios como traductor para transmitir el mensaje a todos los mañicos.
Zaragoza está repleta de vestigios de su pasado romano. El foro, las murallas, el teatro o las termas son algunos ejemplos de aquellos años, pero, sin lugar a duda, la mejor muestra es el propio nombre de nuestra ciudad. Zaragoza deriva de Caesar Augusta (CæsarAugusta > Saraqusta > Çaracozta > Çaragoça > Zaragoza), el nombre de la colonia fundada por César Augusto. Una estatua, que se levanta entre el Torreón de La Zuda y el Mercado Central, recuerda este curioso dato.
La historia del fundador de Zaragoza
César Augusto, cuyo verdadero nombre fue Cayo Octavio Turino, destacó desde joven en la vida pública y militar. Su tío abuelo era nada más y nada menos que el mismísimo Julio César, quien lo convirtió en el sucesor de todo su legado. Tras vivir mil y una aventuras y ganarse el cariño de su pueblo, llegó a la península ibérica para combatir contra cántabros y satures. En lo que hoy en día es Aragón, este emperador fundó varias ciudades que fueron bautizadas en su honor. Entre éstas se encuentra, evidentemente, Zaragoza.