En estos tiempos en los que tan de moda están la comida sin grasa, sin gluten, sin sal, los gimnasios, el running, el fitness, el stretching y un sinfín de inventos modernos para mantenerse en forma, queda un superviviente irreductible, los torreznos.
¿Cómo puede ser que un alimento que hay quien define como “un chicle de grasa” siga siendo uno de los reyes de cualquier bar? ¿Cómo a unas 600 calorías los 100 gramos hay quien lo elige como tapa? ¿Cómo es posible que haya quien los coma aunque luego hagan falta catorce horas corriendo en la cinta para quemarlos? Muy sencillo, porque son DELICIOSOS.
Y, ¿qué son exactamente? Pues parte del costillar del cerdo, con su grasa y su piel. Suelen freírse o tostarse a la parrilla para que la piel quede crujiente y dorada, y por dentro sean jugosos. Aunque los más conocidos son los sorianos, los aragoneses no se quedan lejos. En realidad, son un patrimonio gastronómico orgullosamente compartido por toda España, pero para nosotr@s, no los hay como los de Zaragoza.
Dónde comer torreznos en Zaragoza
Y, ¿dónde podemos comerlos en Zaragoza? Os dejamos el Top 3 de los bares en los que se nos saltan las lágrimas de lo ricos que están.
1. Bar Texas. C/Cuatro de agosto, 4. Esquina con C/Libertad
Foto @cruanof
En El Tubo, como no podía ser de otra manera. El Bar Texas es, igual que los torreznos, un reducto sentimental que se mantiene contra viento y marea. Lo que llamaríamos el típico “bar de abuelos” con todo su encanto y sus delicias culinarias. Una parada obligatoria en Zaragoza.
2. La Bodega del General. C/ Catania, 5.
Foto @isabelegido
El tiempo no pasa por esta taberna. Si pruebas sus torreznos, te querrás quedar a vivir en esa época.
3. El Circo. C/ Jerónimo Blancas, 4.
Foto @blancblau
No sólo tiene una de las mejores tortillas de patata de Zaragoza, y del mundo, también merece la pena abrirse paso a codazos hasta la barra para probar sus torreznos. Un manjar de los dioses escondido en Zaragoza.