El arte tiene el poder de cambiar y humanizar espacios hospitalarios. Conscientes de ello, la organización “Believe in Art” ha impulsado una nueva iniciativa junto al presentador Andreu Buenafuente y el Hospital Vall d’Hebron. El equipo de “Believe in art” ha adaptado a formato mural la obra “Curación” de Andreu Buenafuente, que además de comunicador y humorista pinta desde hace tres décadas.
Estas pinturas murales acompañarán las paredes y columnas de las Áreas Terapéuticas (Fisioterapia y Terapia Ocupacional) y el Hospital de Día de Neurorrehabilitación de Vall d’ Hebron. Gracias a ello, los y las pacientes que se recuperan en el Hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados de Vall d’Hebron mejorarán su bienestar realizando su rehabilitación en un espacio más bello, acogedor y cálido.
Una iniciativa de Believe in Art
Esta acción de humanización ha sido posible gracias a la iniciativa de Believe in Art, una asociación sin ánimo de lucro, cuyo fin es llevar el arte y en particular la creación contemporánea a los hospitales públicos con el convencimiento de que repercute en el bienestar emocional y anímico de los pacientes. Es la primera vez que Andreu Buenafuente realiza una colaboración artística de este tipo con un hospital público: el comunicador, presentador y artista, que tiene un gran interés en el ámbito de la salud, ha desarrollado la propuesta en estrecha colaboración con los expertos de Believe in Art y los profesionales de Vall d’Hebron.Según Andreu Buenafuente, “Poder regalar color a la gente que se está recuperando es el mejor encargo que me han hecho nunca”.
“Que el arte funciona como terapia es, a estas alturas algo incontestable, pero tradicionalmente se trabaja con el arte como terapia activa, nosotras proponemos sumar el arte como terapia contemplativa”, afirma Beatriz Lucea, coordinadora de Believe in Art: “Que los espacios sean bellos, enérgicos, divertidos o calmados, reflexivos o imaginativos según demande la zona a intervenir no solo es importante para el paciente, también para los familiares y sanitarios”.
«Arte como terapia activa»
Esta intervención en el hospital de la capital catalana inaugura el proyecto #believersforarts que pretende la trasformación de esos entornos hospitalarios de la mano de “believers”. “Que un profesional tan querido como Andreu Buenafuente haya confiado en Believe in Art nos reafirma una vez más en la idea de que el arte y la ciencia deben ir de la mano” concluye Beatriz Lucea.
“Los pacientes, cuando hacen rehabilitación, ahora tienen el incentivo de encontrarse en un espacio decorado con sensibilidad artística, con unos diseños exclusivos que ha realizado Andreu Buenafuente, pensados para ellos”, destaca la Dra. Judit Sánchez Raya, jefa del Servicio de Medicina Física y Rehabilitación de Vall d’Hebron: “la motivación resulta crucial en los pacientes que realizan rehabilitación en estos espacios, frecuentemente de edad avanzada o que acaban de sufrir un accidente”. “La arteterapia acompaña los procesos terapéuticos y proporciona autoconocimiento y bienestar, funciona con colectivos y grupos de edad muy diferentes, de niños a gente mayor”, añade Alex Ginés, coordinador de fisioterapia y terapia ocupacional de Vall d’Hebron. “Las obras de Andreu Buenafuente mejorarán la autoestima y el estado de ánimo de estos pacientes, que pasan muchas horas en estos espacios, y en consecuencia favorecerán su recuperación y adherencia al tratamiento”, concluye Sandra Ponce, enfermera supervisora de hospitalización del Hospital de Traumatología, Rehabilitación y Quemados.
Trabajo conjunto entre Believe in Art, Andreu Buenafuente y el Vall d’Hebron
Los equipos de Believe in Art, Andreu Buenafuente y del Vall d’Hebron han trabajado en conjunto para adaptar la obra al entorno hospitalario en cuanto a forma, composición y color. El estilo de Andreu Buenafuente es muy enérgico y se transmite en su uso a través de los colores y formas dinámicas, lo cual es perfecto para el ámbito en el que se ubica. El objetivo fue que después de la intervención artística, las Áreas Terapéuticas (Fisioterapia y Terapia Ocupacional) y el Hospital de Día de Neurorrehabilitación se convirtieran en espacios vitales pero acogedores tanto para el personal médico como para los pacientes.
