Quizá estemos ante la excursión más sencilla y agradecida para introducirse en el mundo de las raquetas de nieve, ya que es relativamente corta, de camino fácil y además acaba en un lugar muy chulo, el Ibón de Piedrafita.
Duración y dificultad de la excursión
La ascensión es por un camino muy fácil, por lo que es apta para todos los públicos y se puede llegar al Ibón de Piedrafita en hora y media yendo a un paso muy tranquilo. El desnivel es de solo 250m por lo que tampoco es muy exigente físicamente.
Recorrido hasta el Ibón de Piedrafita
Comenzaremos la excursión desde el parque faunístico Lacuniacha, recordando que no se puede dejar el coche en su parking si no somos clientes. Unos metros antes de Lacuniacha hay un ensanchamiento al lado de una granja donde se puede aparcar perfectamente, pero hay que ir pronto porque se llena. Otra opción es empezar desde el mismo pueblo de Piedrafita, añadiría unos 20 minutos por pista a la excursión, que no es mucho pero como es un camino que no aporta nada mejor evitarlo.
Para empezar a andar seguiremos la pista por una barrera y un paso canadiense que hay unos metros más adelante de Lacuniacha, posiblemente a esta altura no haya aún nieve, por lo que esperaremos a ponernos las raquetas hasta que no haya cierto espesor. El camino sigue por la pista durante una hora, podemos pillar atajos señalizados para evitar las vueltas, pero para la excursión con raquetas lo recomendable es no salirse de la pista. Como el camino también es usado por muchos esquiadores de fondo evitaremos pisar la huella de los esquíes, siempre respeto ante todo.
Después de aproximadamente una hora andando llegaremos a un cartel que nos marca un desvío hacia el Ibón de Piedrafita a la izquierda remontando un barrancho, ese es el camino que tomaremos. El primer tramo es un poco estrecho y puede hacerse incómodo con las raquetas, pero con un poquito de cuidado lo pasaremos perfectamente hasta la zona que deja de haber árboles y se abre. Ya sólo hay que remontar el último repecho y estaremos frente al Ibón en apenas 20 minutos, seguramente helado en época invernal. Hay gente que se aventura a cruzarlo sobre el hielo, pero no lo recomendamos en absoluto, es algo muy peligroso. Sobre todo mucho cuidado si vais con niños o perros.
Una vez aquí podemos hacer un rodeo del ibón o quedarnos maravillados con el paisaje de Peña Telera. Para la gente que esté fuerte se puede estirar la excursión hasta el Arco de Piedrafita, pero el nivel necesario ya es superior ya que el camino es peor y menos fácil de seguir.
Para la vuelta simplemente tenemos que seguir el mismo recorrido al revés hasta Lacuniacha, volviendo a tener cuidado en el barranco hasta la pista.