Seguro que alguna vez te has preguntado qué es esa gigantesca e imponente torre que hay en el paseo Cuéllar, entre el parque Pignatelli y el Canal Imperial. ¿Es una campanario? No. Esta construcción más propia de ‘El Señor de los Anillos’ o de ‘Juego de Tronos’ es en realidad un gran mausoleo donde descansan los cuerpos de casi 3.000 italianos. En otras palabras, es un cementerio con forma de torre. ¿Lo sabías? Sigue leyendo y averigua todos los secretos que esconde la Torre de los Italianos.
La construcción de la Torre de los Italianos
En la Guerra Civil española combatieron miles de italianos y, por desgracia, muchos de ellos perdieron la vida. Sus cuerpos estaban enterrados por los cementerios de todo el país, lejos de su hogar y de una familia que les venerara. Por ello, el gobierno de Mussolini decidió erigir un gran panteón que albergará a las caídos en la batalla pertenecientes al Corpo Truppe Volontarie. Finalmente, tras la caída del fascismo en Italia, este monumento sirvió como lugar de descanso eterno para todos los italianos que cayeron, independientemente del bando al que defendieron.
El arquitecto Victor Eusa Rasquen ideó la forma de esta gigantesca construcción levantada entre 1.937 y 1.940. En los planos originales se quería alcanzar una altura de 85 metros, lo que es igual a un edificio de 16 de plantas. Pero, por falta de financiación, se quedó en la mitad ostentando 42 metros capaces de impresionar y llamar la atención de cualquier viandante desprevenido. En definitiva, el ‘Sacrario Militare Italiano’ es todo un coloso de piedra maciza en medio de una ciudad que no está acostumbrada a mirar a las alturas.
La novela “Dientes de leche”, del escritor Ignacio Martinez de Pisón, describe a la perfección todos los detalles de la construcción de la Torre de los Italianos.
¿Por qué en Zaragoza?
Por todos es conocida la obsesión de Mussolini por intentar legitimar su régimen totalitario como la continuación de la grandeza del Imperio romano. Incluso llegó a presentarse como el heredero de Augusto. Así que a la hora de elegir el lugar en el que levantar un sagrario militar en España lo tuvo claro. Miró el mapa de la península y… ¡sorpresa! Zaragoza ostenta el nombre de su admirado emperador romano. Si a eso le sumas las buenas comunicaciones y la cercanía de la capital aragonesa con el país de la bota, todo eran ventajas. Y, por ello, la Torre de los Italianos está en la ciudad de los leones.
Un océano de lápidas
Las paredes de la Torre de los Italianos están repletas de lápidas de personas que lo dejaron todo para luchar lejos de sus casas. Cartas de familiares, antiguas fotografías y flores visten las tumbas, poniendo rostro y desvelando los recuerdos de aquellos nombres olvidados. De esta manera, al subir las rampas hasta el mirador que hay en lo alto de la torre, descubriendo en el trayecto las historias de cientos de personas que escribieron punto y final a sus vidas antes de tiempo por una causa lejana, parece que acompañas a sus almas en su camino hasta el cielo. Una experiencia difícil de explicar con palabras.
La iglesia parroquial de la Torre de los Italianos
En la base de la torre, lugar de recuerdo y reconciliación, hay una cripta en la que se celebran los homenajes a los soldados enterrados, especialmente el 2 de noviembre de cada año. En el arco de la entrada de ésta se puede leer una inscripción dedicada a su memoria: «Italia a todos sus combatientes en España». Desde el 31 de marzo de 1.965, la Iglesia de San Antonio de Padua posee el título de iglesia parroquial y está gestionada por los frailes franciscanos capuchinos.
Viajar a Italia sin salir de la capital del cierzo
No es necesario salir de Zaragoza para visitar Italia, pues se considera que el complejo de la Torre de los Italianos es propiedad del gobierno italiano y, por tanto, está en suelo italiano. El monumento se puede visitar todos los días 10:00 a 11:00h.